¿Sabes qué es la equinácea?

La equinácea es una planta medicinal, originaria de América del Norte, pero ganó su popularidad cuando comenzó a cultivarse en el centro de Europa. Los nativos de Norteamérica ya la utilizaban de manera tópica en picaduras, quemaduras y mordeduras de serpientes.

Las más empleadas son “agustifolia”, “purpúrea”y “pallida”, siendo la equinácea purpúrea la más utilizada.

Las partes de la planta que se emplean son las raíces y la parte aérea.

Se han realizado diversos estudios dónde se demuestra el poder de estimular nuestro sistema inmune,  es antiinflamatoria, antiséptica, antivírica, favorece la transpiración, antialérgica y ayuda en procesos de cicatrización.

Sus polisacáridos, previenen que los virus y bacterias penetren en las células mientras tanto las alcamidas tiene propiedades antibacterianas y antifúngicas. Un estudio publicado en 1999, ya revela la importancia de la Equinacea púrpura para prevenir infecciones respiratorias.

Actúa sobre los linfocitos T, responsables de mediar entre las respuestas inmunes de nuestro organismo y diversos microorganismos. Aumenta la producción de citocinas, que son las proteínas responsables de regular la respuesta inmunitaria e inflamatoria, convirtiéndola de vital importancia para combatir procesos infecciosos.

De acuerdo con las recomendaciones de distintos organismos, la equinácea se aconseja tomar de manera preventiva o sintomática. La Agencia Europea del Medicamento, aprueba su uso como tratamiento del resfriado común. Es muy común ver caramelos para el alivio de las molestias en la garganta, que incluyan equinácea.

.Tratamiento sintomático: Se recomienda consumirla con los primeros síntomas, no extendiendo su consumo a 10 días.

. Tratamiento preventivo: Se recomienda su consumo de manera discontinua durante o dos meses, con períodos de descanso. No superar las 8 semanas.