Beneficios del carbón activado
El carbón activado es un potente tratamiento natural que se utiliza para atrapar toxinas y productos químicos en el cuerpo, lo que permite eliminarlos para que el cuerpo no los reabsorba. Se crea mediante la descomposición controlada de compuestos a base de carbono, como cáscaras de coco o turba (materia vegetal). Para fabricar carbón activado, estas fuentes naturales se “activan” con gases a altas temperaturas, lo que expande su superficie. Esto da como resultado un producto final muy poroso, que permite la adsorción de fármacos y toxinas. Está hecho de fuentes naturales y se usa con fines medicinales para afecciones importantes, como intoxicaciones y sobredosis. También es una forma natural de limpiar el cuerpo de sustancias químicas que se acumulan con el tiempo y agotan su salud.
Uno de los usos más populares del carbón activado es para el tratamiento seguro y eficaz de intoxicaciones y sobredosis de drogas. De hecho, los centros de traumatología de emergencia de todo el mundo lo utilizan. Además, se utiliza para reducir la hinchazón y los gases, reducir el colesterol, tratar los problemas de flujo biliar de forma segura durante el embarazo (colestasis intrahepática) e incluso prevenir las resacas. Las investigaciones incluso muestran que el carbón activado funciona mejor que el bombeo del estómago (llamado lavado gástrico) en algunas situaciones.
Beneficios de la salud
Siempre que tome carbón activado, es muy importante beber de 12 a 16 vasos de agua al día. Además, esto ayuda a eliminar las toxinas rápidamente y previene el estreñimiento que experimentan algunas personas.
Aquí están los 10 principales beneficios del carbón activado:
1. Blanquea los dientes
2. Alivia los gases y la hinchazón
3. Trata la intoxicación por alcohol (y ayuda a prevenir la resaca)
4. Limpieza de moho
5. Filtración de agua
6. Eliminación de toxinas de emergencia
7. Salud de la piel y el cuerpo
8. Limpieza digestiva
9. Antienvejecimiento
10. Reduce el colesterol alto
Dosis de carbón activado
La dosis adecuada depende de la afección que se esté tratando o mejorando. En caso de intoxicación o sobredosis, el carbón activado se administra en dosis de 50 a 100 gramos inicialmente. Por lo general, esto es seguido por dosis de carbón cada 2 a 4 horas a una dosis igual a 12,5 gramos por hora. Las dosis para niños suelen rondar los 10-25 gramos. Debido a que cada caso es diferente, es importante consultar un centro local de control de intoxicaciones o los servicios de emergencia en caso de sobredosis o intoxicación.
Para prevenir o reducir los gases intestinales, las dosis varían de 500 a 1,000 miligramos por día. Y para reducir los niveles de colesterol, la dosis más común es de 4 a 32 gramos de carbón activado por día.
Efectos secundarios potenciales
Los efectos secundarios activado pueden incluir estreñimiento y heces negras o, en casos graves, pero raros, lentitud o bloqueo del tracto intestinal, regurgitación hacia los pulmones y deshidratación. Consumir demasiado puede provocar problemas digestivos como estreñimiento.
Antes de aprovechar los múltiples usos del carbón activado, debe considerar cómo puede reaccionar en su cuerpo, especialmente si tiene ciertas condiciones médicas, como hemorragias o bloqueos intestinales, agujeros en los intestinos, deshidratación crónica, digestión lenta o una cirugía abdominal reciente. .
Interacciones con las drogas
El carbón activado puede interferir con la absorción de nutrientes, vitaminas y otros suplementos. También puede interferir con los medicamentos recetados al disminuir la cantidad de medicamento que absorbe su cuerpo, lo que puede reducir la eficacia del medicamento.
Tome carbón activado de 90 minutos a dos horas antes de las comidas, los suplementos y los medicamentos recetados. Pueden ocurrir posibles interacciones adversas con los siguientes medicamentos:
Naltrexona (utilizada para la dependencia del alcohol y los opioides), Acrivastina, Bupropión, Carbinoxamina, Fentanilo, Hidrocodona, Meclizina, Metadona, Morfina, Liposoma de sulfato de morfina, Micofenolato de mofetilo, Ácido micofenólico, Oxicodona, Oximorfona, Suvorexant, Tapentadol, Umeclidinio, Acetaminofina, Antidepresivos tricíclicos, Teofilina