Esperanza de vida vs healthspan

En los últimos años, el concepto de “duración de la salud” ha ganado atención a medida que las personas buscan cada vez más vivir no sólo vidas más largas, sino también más saludables.

Mientras que la esperanza de vida mide el número total de años que vive una persona, la esperanza de vida se centra en la calidad de esos años, enfatizando la vitalidad, la independencia y el bienestar físico y mental.

¿Qué es la esperanza de vida? La esperanza de vida se refiere a la parte de la vida de una persona durante la cual goza de buena salud, libre de enfermedades crónicas y deterioro físico o mental significativo. A diferencia de la esperanza de vida, que sólo mide la longevidad, la esperanza de vida resalta la importancia de mantener una salud de alta calidad a medida que envejecemos.

Una larga vida útil significa menos años dedicados a lidiar con enfermedades o discapacidades debilitantes, lo que permite a las personas disfrutar de un estilo de vida más activo e independiente.

Por ejemplo, alguien con una esperanza de vida de 85 años pero una esperanza de vida de sólo 65 años puede pasar sus últimas dos décadas lidiando con enfermedades crónicas, movilidad reducida u otros problemas de salud.

Por otro lado, una persona con una esperanza de vida que se acerque mucho a su vida experimentaría buena salud y vitalidad durante casi toda su vida.

Esperanza de vida vs healthspan

  • Esperanza de vida: Se refiere al número total de años que vive una persona, desde su nacimiento hasta su muerte.
  • Healthspan: Mide los años vividos en óptima salud, libres de enfermedades graves o discapacidades.

Si bien los avances en medicina y salud pública han aumentado significativamente la esperanza de vida promedio, no siempre han resultado en una esperanza de vida más larga. En muchos casos, las personas viven más pero experimentan años de mala salud hacia el final de sus vidas.

El objetivo de centrarse en la esperanza de vida es cerrar esta brecha, permitiendo a las personas no sólo vivir más tiempo, sino también vivir mejor. Es el concepto de añadir vida a los años en lugar de simplemente añadir años a la vida.

Cómo apoyar la salud

1. Mantener una dieta equilibrada

La investigación es increíblemente clara: una de las mejores cosas que puede hacer para favorecer un envejecimiento saludable es llevar una dieta saludable. El simple hecho de la cuestión es que lo que pones en tu cuerpo afecta tu forma de envejecer.

El Instituto Nacional sobre el Envejecimiento de los Institutos Nacionales de la Salud comparte los siguientes consejos para promover la salud y seguir una dieta de longevidad:

Consume una dieta rica en alimentos integrales y no procesados, incluidas frutas, verduras, proteínas magras, cereales integrales y grasas saludables.

Incorpore alimentos ricos en nutrientes, como verduras de hojas verdes, frutos rojos, nueces y pescados grasos, que se sabe que favorecen la salud general y la longevidad.

2. Haz ejercicio con regularidad

Los beneficios del ejercicio se extienden a la promoción de la salud. Realice una combinación de ejercicios aeróbicos, de entrenamiento de fuerza y ​​de flexibilidad para mantener la masa muscular, la densidad ósea y la salud cardiovascular.

Intente realizar al menos 150 minutos de ejercicio de intensidad moderada por semana para favorecer una longevidad saludable.

3. Prioriza el sueño

Teniendo en cuenta que el sueño (o la falta de él) afecta a casi todos los aspectos de la salud, no debería sorprender que también desempeñe un papel en el envejecimiento de una persona.

El sueño es fundamental para la recuperación física y mental. Los adultos deben aspirar a dormir entre siete y nueve horas de calidad por noche.

De hecho, la falta de sueño puede afectar negativamente a la salud de muchas maneras, lo que a su vez puede provocar un envejecimiento poco saludable.

Establece un horario de sueño constante y cree una rutina relajante a la hora de acostarse practicando una higiene del sueño adecuada. Las ayudas naturales para dormir también pueden ayudar si estás tratando de superar el insomnio.

Cómo apoyar la salud

1. Mantener una dieta equilibrada

La investigación es increíblemente clara: una de las mejores cosas que puede hacer para favorecer un envejecimiento saludable es llevar una dieta saludable. El simple hecho de la cuestión es que lo que pones en tu cuerpo afecta tu forma de envejecer.

El Instituto Nacional sobre el Envejecimiento de los Institutos Nacionales de la Salud comparte los siguientes consejos para promover la salud y seguir una dieta de longevidad:

Consuma una dieta rica en alimentos integrales y no procesados, incluidas frutas, verduras, proteínas magras, cereales integrales y grasas saludables.

Incorpore alimentos ricos en nutrientes, como verduras de hojas verdes, bayas, nueces y pescado graso, que se sabe que favorecen la salud general y la longevidad.

5 consejos para elegir alimentos más saludables a medida que envejece - Dr. Ax

2. Haz ejercicio con regularidad

Los beneficios del ejercicio se extienden a la promoción de la salud. Realiza una combinación de ejercicios aeróbicos, de entrenamiento de fuerza y ​​de flexibilidad para mantener la masa muscular, la densidad ósea y la salud cardiovascular.

Intente realizar al menos 150 minutos de ejercicio de intensidad moderada por semana para favorecer una longevidad saludable.

3. Prioriza el sueño

Teniendo en cuenta que el sueño (o la falta de él) afecta a casi todos los aspectos de la salud, no debería sorprender que también desempeñe un papel en el envejecimiento de una persona.

El sueño es fundamental para la recuperación física y mental. Los adultos deben aspirar a dormir entre siete y nueve horas de calidad por noche.

De hecho, la falta de sueño puede afectar negativamente a la salud de muchas maneras, lo que a su vez puede provocar un envejecimiento poco saludable.

Establezca un horario de sueño constante y cree una rutina relajante a la hora de acostarse practicando una higiene del sueño adecuada. Las ayudas naturales para dormir también pueden ayudar si estás tratando de superar el insomnio.

4. Manejo el estrés

El estrés crónico puede acelerar el envejecimiento y contribuir a enfermedades crónicas. Practique atención plena, meditación, yoga y otros analgésicos naturales para reducir los niveles de estrés.

Construye una red de apoyo sólida y busqca ayuda cuando sea necesario también. Las investigaciones muestran que una salud mental adecuada es un componente clave para la salud.

5. Mantente mentalmente activo

Parte de envejecer de forma saludable es mantener la cognición. Por eso es importante mantener la mente alerta y activa a medida que envejecemos.

Desafía tu cerebro con actividades como leer, hacer rompecabezas o aprender nuevas habilidades para mantener la función cognitiva.

El compromiso social también juega un papel clave en la salud mental, así que manténgase conectado con amigos y familiares.

Una de las mejores formas de apoyar la cognición en la vejez es mantenerse físicamente activo. De hecho, varios estudios muestran que hacer ejercicio, comer bien y participar en actividades mentalmente estimulantes tienen beneficios sinérgicos. Todos ellos mejoran la salud física y mental.

6. Atención sanitaria preventiva

Los chequeos, las pruebas de detección y las vacunas periódicas pueden ayudar a detectar posibles problemas de salud a tiempo.

7. Evita hábitos nocivos

Los hábitos de vida pueden beneficiar o perjudicar su salud. Las prácticas mencionadas anteriormente fomentan un envejecimiento saludable, mientras que se ha demostrado que ciertas cosas, como fumar, beber en exceso y comer mal, afectan negativamente la longevidad y el envejecimiento saludable.

Para envejecer con gracia y salud, siga estos consejos:

  • Deja de fumar, limita el consumo de alcohol y evita el exceso de azúcar y alimentos procesados
  • Protege tu piel del daño de los rayos UV usando protector solar.
  • Manten un peso saludable.