PSILOCIBINA: NUEVAS CONEXIONES NEURONALES
La psilocibina es un compuesto psicodélico que se encuentra en ciertas especies de hongos y que ha ganado mucha atención en los últimos años debido a sus propiedades terapéuticas referentes a la salud mental. Pero en realidad en culturas antiguas se utilizaban los hongos. Incluso los Aztecas se referían a ellos como “Teonanácatl”, que significa la carne de los Dioses, y se utilizaban en ceremonias religiosas para facilitar la comunicación con lo divino. Los propósitos de uso en la antigüedad en las culturas Mesoamericanas eran religiosos y espirituales. Algo interesante es que hoy en día hay pacientes que han hecho terapia con uso de psilocibina y mencionan que es una experiencia muy espiritual.
La mayoría de las investigaciones se han realizado para estudiar los beneficios terapéuticos de varios desórdenes en la salud mental, y mostrando muy buenos resultados en el tratamiento de la depresión, la ansiedad y la adicción (específicamente del tabaco y del alcohol). Se ha observado que una micro dosis de psilocibina combinada con psicoterapia ha reducido la ansiedad y la depresión en pacientes con cáncer en fases avanzadas y cuya vida está en riesgo. Las investigaciones aun son muy tempranas, pero los resultados prometedores.
En el caso de las investigaciones relacionadas a la depresión, ansiedad, y otros desórdenes del estado de ánimo, los estudios sugieren que ayuda a reducir la sintomatología de estas condiciones, mejorar el ánimo y mejorar el bienestar emocional.
Esto se debe por su comportamiento con el sistema de serotonina del cerebro, en especial la interacción con el receptor 5-HT2A, en la que provoca un cambio en la actividad cerebral y conectividad, que es justo en ello que tiene el efecto terapéutico prometedor. También se ha observado que promueve la neuroplasticidad, facilitando la introspección e incremento en la apertura emocional, para permitir que los individuos puedan ganar nuevas perspectivas y descubrimientos.
Es de gran importancia mencionar que se deben tener consideraciones y direcciones de su uso éticas, ya que es una sustancia psicodélica muy potente. Siempre debe de considerarse esta terapia bajo la guía de un profesional de la salud certificado y bajo un espacio de control y supervisión. No se debe auto-administrar o quererse administrar para uso recreacional cuando se trata de la salud mental, y siempre tomarse en cuenta que debe realizarse en micro dosis. Aun se sigue realizando mucha investigación para tener un mejor entendimiento tanto de sus beneficios, pero también de los riesgos y cuáles son los protocolos terapéuticos óptimos.
El estado legal aun varía en los diferentes países y jurisdicciones, por lo que se recomienda cumplir con las regulaciones legales específicas de donde vives. Y su uso se recomienda en lugares autorizados en los que clasifican la psilocibina como “sustancia controlada sin uso médico reconocido” o en donde se clasifica como “uso permitido para investigació o propósitos terapéuticos”.
Para concluir, gracias a la investigación científica actual se puede tener un entendimiento del gran potencial que tiene la psilocibina en promover la salud mental. La responsabilidad en su uso es clave, y desafortunadamente mucha gente quiere crecer estos hongos para uso recreativo, lo cual puede llevar a que se pierda credibilidad en la investigación y sea una sustancia que nuevamente sea prohibida. Seamos responsables con su uso y tomemos decisiones informadas, así como elijamos siempre hacerlo de manera controlada y bajo supervisión del especialista en salud certificado.