¿Sabes qué son los síndromes mielodisplásicos?
El síndrome mielodisplásico (también llamado mielodisplasia o, más recientemente, neoplasia mielodisplásica) se refiere a un grupo de cánceres que impiden que las células madre sanguíneas (hematopoyéticas) maduren y se conviertan en células sanguíneas sanas. Sin suficientes células sanguíneas sanas, se pueden desarrollar afecciones graves como anemia, infecciones frecuentes y sangrado que no se detiene. Algunas personas con SMD pueden desarrollar leucemia mieloide aguda (AML).
Tipos de síndrome mielodisplásico
Existen seis tipos de síndromes mielodisplásicos
- La cantidad de glóbulos rojos, blancos y plaquetas sanos: las personas con niveles de glóbulos rojos más bajos de lo habitual tienen anemia, lo que puede hacer que se sientan débiles y con dificultad para respirar.
- La cantidad de células sanguíneas inmaduras o blastos: los blastos ocupan espacio en la médula ósea, dejando menos espacio para las células sanguíneas sanas. Si no tienes suficientes glóbulos blancos sanos, es posible que tengas infecciones frecuentes. Si no tienes suficientes plaquetas sanas, es posible que tengas un sangrado que no se detiene.
- Sideroblastos: los sideroblastos son glóbulos rojos inmaduros que almacenan hierro en lugar de usarlo para producir hemoglobina. La hemoglobina es una proteína que ayuda a los glóbulos rojos a transportar oxígeno por todo el cuerpo. Se necesita hierro para hacer eso. Si los patólogos detectan sideroblastos, significa que la hemoglobina no está funcionando como debería.
- Cambios cromosómicos: los cromosomas son las partes de nuestras células que contienen genes. Los genes están hechos de ADN. Los cromosomas inusuales pueden significar que algo ha afectado su ADN, provocando cambios en los cromosomas de sus células sanguíneas.
¿Cuáles son los síntomas del síndrome mielodisplásico?
Puedes tener MDS sin tener ningún síntoma. A veces, las personas se enteran de que tienen un tipo de este síndrome después de realizarse análisis de sangre de rutina. Los niveles bajos de glóbulos rojos (anemia) son el síntoma más común. Pero los síntomas de la anemia y otros síntomas del SMD pueden parecerse a los de otras afecciones menos graves. Algunos síntomas son los siguientes:
- Dificultad para respirar
- Te sientes débil o muy cansado y descansar no te hace sentir menos cansado.
- Notas que tu piel está más pálida de lo habitual
- Tienes moretones o sangras con más frecuencia de lo habitual.
- Notas que tienes manchas del tamaño de un alfiler en tu piel. Esto puede ser una señal de que tiene petequias, que son pequeñas manchas de sangrado debajo de la piel.
- Tiene infecciones y fiebres frecuentes.
¿Qué causa el síndrome mielodisplásico?
Las personas parecen desarrollar SMD de dos maneras: participan en actividades que aumentan su riesgo de desarrollar el síndrome o heredan ciertas condiciones.
Actividades vinculadas a MDS
- Tratamiento pasado con quimioterapia o radioterapia. En términos generales, los síntomas del tMDS pueden aparecer de cinco a siete años después de la terapia.
- Estar expuesto a ciertos carcinógenos, incluido el humo del tabaco, pesticidas y solventes como el benceno.
- Estar expuesto a metales pesados, como mercurio o plomo.
- Condiciones genéticas relacionadas con MDS
Entre el 4% y el 15% de las personas con esta afección han heredado afecciones que aumentan las posibilidades de padecer la enfermedad. Esas condiciones incluyen:
- Anemia de Fanconi: esta es una condición genética poco común en la que la médula ósea no produce suficientes células sanguíneas sanas.
- Disqueratosis congénita: esta es otra afección genética poco común en la que la médula ósea no produce suficientes células sanguíneas sanas.
- Anemia de Diamond-Blackfan: este es un trastorno sanguíneo poco común que ocurre cuando la médula ósea no produce suficientes glóbulos rojos.
¿Cómo se diagnostica el síndrome mielodisplásico?
- Conteo sanguíneo completo (CBC) con diferencial: se extraerán muestras de sangre para analizar sus glóbulos rojos y blancos, incluido el recuento de la cantidad de cada tipo de glóbulo blanco.
- Frotis de sangre periférica: revisarán su muestra de sangre para detectar cambios en la cantidad, tipo, forma y tamaño de las células sanguíneas, y si tiene demasiado hierro en sus glóbulos rojos.
- Análisis citogenético: un patólogo médico busca cambios en los cromosomas de las células sanguíneas observando una muestra de sangre bajo un microscopio.
- Biopsia de médula ósea: para realizar este procedimiento, se inserta una aguja hueca en el hueso de la cadera para extraer médula ósea, sangre y un pequeño trozo de hueso para examinarlo con un microscopio.
¿Cuáles son las etapas del síndrome mielodisplásico?
Se utiliza un sistema de clasificación de riesgos llamado Sistema Internacional de Puntuación de Pronóstico. Estos son los factores que los proveedores consideran:
- Si se presenta signos o síntomas de anemia, sangrado o infección.
- Riesgo de desarrollar leucemia.
- Ciertos cambios en sus cromosomas.
- Si se desarrolló MDS después de recibir quimioterapia o radioterapia para el cáncer.
- Edad y estado de salud general.
¿Cómo se trata el síndrome mielodisplásico?
Los proveedores de atención médica consideran varios factores al desarrollar planes de tratamiento para SMD:
- El tipo de MDS que se tiene.
- Si se presentan afecciones MDS como anemia, sangrado o infecciones.
- Si se desarrolló MDS después de recibir quimioterapia o radioterapia para el cáncer.
- Edad.
- Estado de salud general.
El tratamiento para el síndrome mielodisplásico puede incluir atención de apoyo y tratamiento para eliminar las células sanguíneas no saludables. La atención de apoyo puede incluir:
- Transfusión de sangre: si tienes anemia, es posible que reciba transfusiones de glóbulos rojos. Si tienes problemas de sangrado, es posible que reciba transfusiones de plaquetas.
- Agentes estimulantes de la eritropoyesis (AEE): este tratamiento aumenta los niveles de glóbulos rojos maduros.
- Antibióticos: Los MDS pueden afectar sus glóbulos blancos y aumentar su riesgo de infecciones.
Los tratamientos para eliminar las células sanguíneas no saludables pueden incluir:
- Quimioterapia: los proveedores de atención médica pueden usar la misma quimioterapia que se usa para tratar la leucemia mieloide aguda.
- Terapia inmunosupresora: los proveedores pueden usar este tratamiento para ciertos subtipos de SMD. La terapia inmunosupresora suprime los sistemas inmunológicos hiperactivos y puede ayudar a reducir la necesidad de transfusiones.
- Trasplante de células madre: Los trasplantes de células madre reemplazan las células productoras de sangre con células madre obtenidas de su sangre o médula ósea o de la sangre o médula ósea de un donante. Las células madre se congelan y almacenan mientras recibe quimioterapia. Luego, las células madre se descongelan y se le devuelven mediante infusión intravenosa. Las células reinfundidas luego crecen y se restauran en las células sanguíneas.